Sí señores. De nuevo nos encontramos con la cita anual. Más que Sant Jordi,el Día del Libro, para hacerlo más internacional y que quepamos todos. Y como buen blog de libros que se precia, hay que recomendar (en este caso un par de) libros.
El primero es un clásico que estoy releyendo en estos tiempos de antieuropeísmo y xenofobia. Precisamente, se trata de uno de los escritores más europeístas que han existido: Stendhal (o Henri Beyle). El creador de la novela histórica bien entendida. El bardo del amor, como muy bien se puede leer en El rojo y el negro. Un texto con claroscuros pero cuya carga emocional deja al lector sin aliento. Cómo disfrutaría Stendhal de los acontecimientos que están teniendo lugar en el mundo árabe. Él si era una hombre comprometido. ¿No querían libros que destilaran vida? Pues esta, mi primera recomendación, así lo hace.
La segunda, es más especial. Tiempo atrás me lleve la grata sorpresa de encontrar publicado a un antiguo compañero de instituto: Pablo Sánchez. En 2005 había ganado el Premio Lengua de Trapo de Novela por Caja Negra. El año pasado se llevó la primera edición del Premio Francisco Casavella, que otorga Destino, con El alquiler del mundo. Compré el libro y me gustó. No solo porque se atreve a poner los puntos sobre las ies respecto al neoliberalismo imperante, tal como comenta Vicente Luis Mora en un magnífico post que nos pone al día de lo que está sucediendo. También por el uso de los formatos económicos y empresariales para pergeñar el texto. Y por el estilo. Es mi segunda recomendación. Ni que sea por vindicar la maltrecha escuela pública en donde ambos coincidimos.
Y con esto, ya solo queda desearles un feliz Día del Libro.
Carlos Gámez.
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